sábado, marzo 18, 2006

Congreso Internacional Penitenciario en España

Entre el 30 de marzo y el 1º de abril se desarrollará en Ciudad Condal, España, un Congreso Penitenciario Internacional que deliberará bajo el lema “La función social de la política Penitenciaria”, para abordar prioritariamente la “intervención con los hombres y mujeres encarcelados”; “organización penitenciaria” y “régimen laboral de los trabajadores penitenciarios” a lo que se sumarán otras problemáticas actuales de la cárcel.

El Congreso Internacional es organizado por la Dirección General de Instituciones Penitenciarias dependiente del Ministerio del Interior de España y la Secretaría de Servicios Penitenciarios, Rehabilitación y Justicia Juvenil del Departamento de Justicia de la Generalitat de Cataluña.

En la presentación Carlos García Valdés, ex director de Instituciones Penitenciarias y quien oficiará de presidente del comité científico del evento, explicó que las tres jornadas que durará el Congreso “recuperan una tradición que viene del lejano congreso europeo de Londres de 1872, desde cuando el continente albergó por décadas congresos internacionales que estudiaron aspectos de la práctica penitenciaria como el sistema de aislamiento, las condiciones sanitarias, el trabajo, la instrucción y educación de los internos” entre otras temáticas.

“Todos sirvieron para que la ciencia penitenciaria evolucionara” afirmó García Valdés, que agregó que en esos congresos España estuvo representada por los mejores especialistas de derecho penal y penitenciario del momento como Concepción Arenal, Dorado Montero, Silvela, Lastres, Cadalso o Salillas.

De acuerdo a los organizadores, “la seriedad y el rigor del congreso están garantizados por la talla científica de los ponentes y participantes en las mesas redondas, lo cual hace que estemos ante un hito en la ciencia penitenciaria..-

Información completa clik aquí

miércoles, marzo 15, 2006

España:sindicatos penitenciarios a la huelga para trasladar presos peligrosos

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CSIF) acordó, junto con el Sindicato de Prisiones (ACAIP) y la Unión General de Trabajadores (UGT), pedir a la Dirección General de Instituciones Penitenciarias del Ministerio del Interior el traslado de los 70 presos de máxima peligrosidad alojados en el centro penitenciario El Acebuche. La demanda es acompañada con el anuncio de paros de actividades por parte de los guardias carcelarios todos los martes de marzo entre las 11 y las 11,20.

El planteo y la amenaza de medida de fuerza de los guardias españoles sindicalizados, se produce en respuesta a los intentos de agresión a los agentes carcelarios que en seguidilla fueron provocados por los presos de El Acebuche en los últimos días.

La noticia, insólita para las leyes y las costumbres laborales penitenciarias latinoamericanas, es sin embargo frecuente en países con personal carcelario sindicalizado como España, Italia y otras naciones europeas, donde los guardias con sus pedidos influyen en mayor o menor medida en la gestión de las cárceles. Uno de los planteos habituales refiere a quejas por los riesgos contra la integridad física que asumen los guardiacárceles en sus puestos de trabajo.

A la huelga
En declaraciones a la agencia Europa Press, reproducidas por el portal del diario ABC de España, el titular de CSI-CSIF en Almería, Francisco Iglesias da Silva, adelantó que “todos los martes entre las 11.00 y las 11.20 horas habrá paros en la prisión almeriense” para reivindicar el reclamo de traslado de los presos más peligrosos a otros establecimientos, que fue firmado en una circular por los guardias.

Iglesias da Silva alertó que los 70 internos de “peligrosidad extrema” en El Acebuche, «han de ser trasladados a otros centros que reúnan las condiciones», lo que argumentó al señalar que esta prisión era de “máxima seguridad en 1986, pero no hoy” cuando por el estado de su infraestructura “no puede albergar a internos de este tipo” consideró.

El vocero de los guardias fue en seguida enfático al insistir en que en las actuales condiciones de la penitenciaría de Almería “es imposible garantizar la vida de los funcionarios y de los internos”.
Según el sindicalista los traslados contribuirían a descongestionar la prisión ya que “una vez vaciados los módulos ocho, nueve y once se podría distribuir al resto en estos departamentos”.

Por su parte el delegado de gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, reconoció la legitimidad del pedido de los sindicatos de guardias al conceder que “debe hacerse una redistribución de internos para tratar de resolver ese problema” que se vive en El Acebuche.

No obstante López Garzón no dio lugar a expectativas de llegar en el corto plazo a la solución concreta que significarían la habilitación de nuevas plazas carcelarias: “por mucho esfuerzo que se haga eso no es inmediato” afirmó, tras lo cual proyectó las mejoras hacia el programa de construcciones penitenciarias previsto por el gobierno español entre este año y 2012, para la erección de once prisiones nuevas y ampliaciones en otras cuatro.

En idéntico sentido se manifestó el funcionario cuando tuvo que responder acerca del pedido sindical de incremento de personal carcelario en las prisiones andaluzas.

El reclamo de los guardias sindicalizados es uno más en defensa de las condiciones laborales en que se desempeñan, donde se incluyen la limitación de riesgos; el rechazo a la sobrepoblación penal; quejas por falta de seguridad en los edificios carcelarios y por la falta de mantenimiento además de, por supuesto, los salarios y la cobertura social del personal penitenciario.-

domingo, marzo 12, 2006

China deja de buscar ganancias en sus prisiones



El gobierno chino inició una reforma de su sistema penitenciario que prioriza el tratamiento de los internos, desplazando la necesidad de obtener ganancias generadas por la producción de los talleres carcelarios.

“El principal objetivo es desligar a las prisiones de las empresas a través de las cuales se financian” afirmó la agencia oficial China “Beijing Informa” en su sitio http://www.bjreview/, que explica que “es difícil” trabajar en la rehabilitación de los presos cuando los guardias de prisiones deben atender la financiación de parte de su funcionamiento.

Por la reforma penitenciaria que este año alcanzaría a seis provincias, la mayoría de los agentes carcelarios que trabajan en las empresas asociadas a las prisiones serán reasignados al control y reeducación de los internos, aliviados de la preocupación por perseguir la financiación de los establecimientos.

Para apoyar los programas piloto el Estado y los gobiernos provinciales invertirán en las prisiones del país más de 1.000 millones de yuanes (121 millones de dólares) este año y 4.000 millones de yuanes (483 millones de dólares) cada año siguiente de ampliación del proceso, afirma la agencia periodística de ese país.

El sistema penitenciario chino es todavía hoy un reflejo de la política del país que, tras la Revolución Cultural de la primera mitad del siglo pasado, cuando se acercaba a los mil millones de habitantes para alimentar y que hoy supera largamente, procuró como premisa el milagro de la superproducción masiva sostenida en el tiempo a la que destinó a la población por las buenas o por las malas.

A pesar del progresivo giro hacia la economía de mercado que transforma al gigantesco país en las últimas dos décadas sorprendiendo, el gobierno chino encarcela a los disidentes políticos y a quienes quieren ejercer la libertad de expresión cuestionando al férreo control social por el aparato estatal.

Hasta hoy
El presupuesto asignado por el gobierno para el funcionamiento de las prisiones sólo cubre una parte de los gastos; el resto lo financian las empresas comerciales que operan asociadas al sistema penitenciario en el área del trabajo carcelario. Si estas empresas generan beneficios, las prisiones se financian. Si por el contrario no hay rentabilidad, los gastos no se cubren y el funcionamiento de la prisión se ve jaqueado.

Las cárceles tuvieron como misión asociarse a empresas creadas o elegidas por el Estado para que no sólo se financiaran, sino además con la orden de generar ganancias a través del trabajo de los presos. Las ganancias se lograron azuzadas por el autoritarismo del sistema político chino; pero resultaron antieconómicas. De esto la necesidad de la reforma ahora permitida por la flexibilización de la política del país.

En el actual sistema carcelario los establecimientos y la relación con las empresas asociadas que comercializan el trabajo de los internos están bajo la dirección de los funcionarios de prisiones y es difícil homogeneizar el trabajo de rehabilitación de los presos con el desafío de la producción rentable, advierte el trabajo periodístico.

Detalla que con la reforma se crearán dos sistemas independientes. Uno de administración de la cárcel regulado por la Ley de Prisiones china, con la misión de velar por el cumplimiento de penas, castigos y rehabilitación de los internos. El otro sistema, de gestión de empresas, comercializará el producido de los emprendimientos carcelarios. Las empresas serán reguladas de acuerdo a la Ley de Corporaciones china y deberán asegurar trabajo a los presos.

El Estado y los gobiernos provinciales controlarán los ingresos y gastos de las prisiones.

Una vez que las cárceles y las empresas sean separadas dejarán de recibir ingresos de las empresas asociadas y el costo de su funcionamiento estará exclusivamente a cargo de los gobiernos provincial y central.

Lentitud
“En una economía de mercado la información sobre las necesidades de los consumidores y la respuesta rápida a esa demanda son de vital importancia. Las cárceles tienen un mecanismo de funcionamiento distinto al del mercado, donde el flujo de información es lento en las empresas asociadas, por lo que la toma de decisiones es lenta” para los tiempos del mercado explica Jun.

Por otra parte la gestión de empresas asociadas a prisiones implica otros desafíos; los internos necesitan motivación para trabajar y una intensa capacitación que les permita aprender las técnicas modernas” explica en su trabajo Wang Jun. También son condicionamientos “las limitaciones de seguridad que restringen los movimientos de las empresas en las cárceles y por el mismo motivo que la mayoría de las prisiones se localizan en zonas aisladas de las ciudades”, dos cuestiones que plantean costos extras muchas veces antieconómicos para los emprendimientos.

Además, agrega el periodista, “como las prisiones gestionan los negocios y tienen el control de ingresos y gastos con supervisión exterior muy escasa, la corrupción es un hecho habitual, lo que es una razón más para apoyar la reforma”.

Detalla que el personal carcelario “encargado de la reeducación de los internos no llega al 8% del total, lo que dista mucho del 30% en Europa o Estados Unidos” y añade una particularidad: “en muchas prisiones los funcionarios se seleccionan más por su experiencia y habilidad en los negocios que por sus conocimientos de rehabilitación y disciplina” de presidiarios señala.

La ley carcelaria de China establece que “todo interno en buen estado de salud debe realizar algún trabajo y si contribuyen para que las prisiones obtengan beneficios, pueden conseguir reducciones en sus condenas, la libertad bajo fianza u otro trato preferencial, explicó Peng Yulong, director del Departamento de Administración de Cárceles de Beijing, quien no obstante subrayó que los beneficios del trabajo en las cárceles mantienen ocupados a los presos, reduce los disturbios catalizados por el ocio y les proporciona habilidades en oficios que les ayudarán en su rehabilitación.

“En un sistema como el actual, el tiempo asignado a la reeducación de los internos es escaso debido a la escasez de personal y de financiación gubernamental”, recalcó Peng Yulong.

El Ministerio de Justicia comenzará a experimentar la reforma en las provincias de Hubei, Heilongjiang, Shanghai, Jiangxi, Chongqing y Shaanxi. La reforma también prevé que los beneficios generados por el trabajo en la prisión sean utilizados para mejorar las condiciones laborales y de vida de los internos.-

Información completa clik aquí