martes, marzo 21, 2006

Internos federales y bonaerenses a estudiar

Los servicios penitenciarios federal y bonaerense, que alojan en conjunto más de la mitad de la población penal de la Argentina, iniciaron los ciclos lectivos de este año con cifras alentadoras: mientras casi 45% de los detenidos se inscribieron en alguno de los niveles educativos que se dictan en las cárceles federales; un tercio del total de internos de Buenos Aires lo hizo en las unidades penales de la provincia.

En este distrito se resaltó decididamente la importancia del comienzo de las clases en aulas carcelarias al encabezar la ceremonia alusiva la plana mayor del gobierno provincial. Asistieron el gobernador Felipe Solá; la vice Graciela Giannettasio; el ministro de Justicia, Eduardo Di Rocco; la directora general de Cultura y Educación, Adriana Puiggrós, y el titular del Servicio Penitenciario bonaerense (SERPENBA), Fernando Díaz, entre otras autoridades y funcionarios.

“Es la primera vez que un gobernador bonaerense inaugura el ciclo lectivo en un establecimiento penitenciario” subrayó la gacetilla de prensa del Ministerio de Justicia provincial al informar sobre la ceremonia que se realizó el 13 de marzo en la Unidad 24 de Florencio Varela.

En las palabras alusivas Solá se aventuró a anunciar que “el objetivo para el 2007 es que el 70% de la población -penal- tenga acceso a la educación porque se van a sentir una persona” dijo. “Las cárceles no son para castigo, son para proteger a los de afuera de la posible peligrosidad de los de adentro, pero deben ser sanas y limpias y otorgar un trato humano cotidianamente” agregó el gobernador, quien finalmente puntualizó que “no estamos construyendo cárceles para tener más presos sino para que estén mejor; durante años el sistema carcelario no cumplió con las normas constitucionales, agradezco al ministro Di Rocco por la enorme preocupación de mejorar las cárceles y la situación de los internos”.

Por su parte, el ministro Di Rocco, consignó que “la educación es fundamental para la socialización y para volver a estar dentro del sistema; es obligación del Estado que ustedes tengan educación” recordó.

En el ámbito federal el lanzamiento del ciclo lectivo, que desde hace años registra una nutrida inscripción, no tuvo la misma suerte: toda la conducción del sistema penitenciario federal optó por viajar a Posadas para asistir al Consejo Federal Penitenciario que se desarrolló en esa ciudad. El acto realizado el 8 de marzo en el Complejo Penitenciario Federal de Ezeiza fue encabezado por el director general de Régimen Correccional del SPF, inspector general César Montenegro.

Los registros de inscripción en los ciclos lectivos carcelarios de las jurisdicciones citadas entusiasman por el porcentaje significativo de internos que inician las clases, aunque es sabido que las cifras bajan indeseablemente durante el año en buena parte por falta de perseverancia de los detenidos y por las salidas del sistema educativo que asocian las libertades.

Así y todo el saldo reconforta y debe destacarse el trabajo de los maestros y autoridades carcelarias en los servicios penitenciarios federal y bonaerense cuando la meta es enseñar: la educación es una parte del tratamiento penitenciario; probablemente la más sólida para brindar al preso mejores armas de percepción e información, es decir alternativas al delito y, por lo tanto, alternativas a la cárcel misma.

Más allá de la retórica y de cualquier promesa hoy más de 4 mil presos, de un total de 10 mil, acceden a las aulas carcelarias federales y más de 8 mil detenidos bonaerenses, de un total de casi 25 mil, lo hacen en los recintos educativos del Servicio Penitenciario de Buenos Aires. Es noticia.-