jueves, febrero 16, 2006

Contundente medida pasó a retiro a 71 guardias del SERPENBA

Setenta y un oficiales y suboficiales del Servicio Penitenciario bonaerense (SERPENBA), en su mayoría encausados judicialmente por corrupción o maltrato a los presos, fueron pasados a retiro obligatorio por decisión del ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, Eduardo Di Rocco.

Tras la drástica medida, fuentes de esa cartera dijeron a Prisiones y Penas que “no se descarta” que otros efectivos con denuncias o causas pendientes puedan ser expulsados de la fuerza, en el marco de las facultades que fija la ley de Emergencia Penitenciaria aprobada por la legislatura bonaerense el año anterior.

“Solicitamos la ley para que quien crea que el preso dejó de ser persona o ha perdido todos sus derechos tenga que buscarse otro lugar fuera de nuestra institución” enfatizó Di Rocco al explicar a la prensa la resolución tomada.

Según el texto de la resolución 16 oficiales y 2 suboficiales pasaron a retiro, mientras que a otros ocho oficiales y 45 subalternos se los declaró “prescindibles”. Se aclaró que los sancionados “no podrán regresar” a las filas del SERPENBA.

Entre los echados se encuentra un ex jefe de la unidad 24 de Florencio Varela a quien, junto a otros cinco subordinados –todos en disponibilidad-, se les imputó la venta diaria de 150 kilos de pan elaborado por los presos con destino solidario.

En la misma unidad, otro ex jefe carga con la denuncia de “venta de cupos” en el alojamiento de internos, mientras que otros oficiales y suboficiales en disponibilidad desde febrero del año pasado fueron acusados de malos tratos a los detenidos en la cárcel de Junín y en las unidades 9 y 29. Finalmente se expulsó a guardias “que no cumplieron sus deberes o no mostraron contracción al trabajo” afirmó la cartera de justicia bonaerense.

Fuentes ministeriales señalaron que “no se descartan” otras separaciones de la fuerza penitenciaria provincial entre quienes están encausados judicialmente o sumariados por la comisión de faltas graves. En este listado se encuentran guardias cuestionados por su actuación en el sangriento motín de Magdalena del año anterior. El Servicio Penitenciario de Buenos Aires está integrado por unos 11 mil efectivos.

La ley de Emergencia Penitenciaria provincial se tramitó hace dos años como iniciativa conjunta del Ministerio de Justicia provincial y el entonces interventor del SERPENBA, Ricardo Cabrera, a su vez director nacional del Servicio Penitenciario Federal (SPF) en los años 1996 y 1997.

Al dejar su cargo Cabrera, hoy juez, recomendó al ministro Di Rocco para sucederlo al actual jefe del servicio penitenciario, Rodolfo Díaz –también ex del SPF-, cuya gestión aparece valorada por el ministro de acuerdo a la lectura de los hechos de la actualidad penitenciaria bonaerense.